La depresión y el aburrimiento pueden confundirse debido a que sus síntomas son bastante similares, y durante todo este tiempo de pandemia y confinamiento ha incrementado el número de personas que los padecen y no saben diferenciar por lo que están pasando, sin embargo, no todas las emociones negativas representan patologías.
El aburrimiento puede ser descrito como tedio, desgano, falta de entusiasmo y sensación de que el tiempo transcurre más lento. El aburrimiento puede ser definido como la incapacidad de disfrutar de ocio, vivimos en una sociedad donde las actividades están sobre valoradas y el ocio no produce ningún crédito. Una persona aburrida es incapaz de enfocar su energía en fines recreativos, y generalmente los momentos de ocio pueden provocarles angustia.
Hay diferentes tipos de aburrimiento que pueden afectar a las personas y todos tienen diferentes factores que lo producen.
Aburrimiento ocasional: es un aburrimiento transitorio que puede ser irritante, sin embargo el tiempo de duración de este no es muy prolongado. Sus tipos son:
Por indiferencia: Nada de lo que sucede a su alrededor le produce interés, nada le importa.
Por desmotivación: las tareas que realizan son tan rutinarias y repetitivas que ya no generan ninguna emoción.
De búsqueda: cuando constante mente se siente la necesidad de buscar algo que hacer.
Aburrimiento crónico: es un estado constante de insatisfacción y de incapacidad de encontrar motivación, la persona que lo padece empieza a sentir un vacío y este si puede conducir a trastornos graves tales como la depresión o la ansiedad. El aburrimiento crónico o boreout puede presentar síntomas como:
Dificultad para concentrarse.
Falta de interés en aspectos generales.
Falta de motivación para empezar nuevas actividades.
Convicción de que su entorno carece de estímulos interesantes.
Percepción de que el tiempo transcurre con más lentitud.
Sensación de vacío.
Constante sensación de insatisfacción.
Algunas de las causas del Aburrimiento crónico o Boreout son:
- Perdida de interés en actividades que antes resultaban excitantes.
- Actividad profesional poco satisfactoria.
- Escases de aficiones y estímulos.
- Consumo excesivo de alcohol y drogas.
- Exceso de expectativas
Por otra parte, la depresión es un conjunto de síntomas de predominio afectivo (tristeza patológica, apatía a, desesperanza, decaimiento, irritabilidad, sensación subjetiva de malestar e impotencia frente a las exigencias de la vida) aunque en mayor o menor grado puede presentar síntomas de tipo cognitivo, volitivo y somático. La depresión puede presentarse en cualquier edad, sin embargo es más común en personas entre los 15 y los 45 años de edad y la sintomatología puede varía de acuerdo a la edad de quien la padece, entre más jóvenes muestran síntomas de comportamiento, mientras que los mayores presentan síntomas somáticos.
Causas.
Las causas de la depresión pueden ser variadas, sin embargo diversos expertos afirman que las personas responsables, con baja autoestima, exigentes, perfeccionistas, con un elevado sentido de poder y de respeto, con baja tolerancia al fracaso, y minuciosas tienen una mayor tendencia a padecer de depresión. A pesar de que la depresión no tiene una causa específica hay factores como la perdida de trabajo, la ruptura de alguna relación o algún shock emocional que no fue tratado puede terminar en una depresión, asimismo hay otros factores que pueden ser explicados por la bioquímica, las personas que padecen de esta enfermedad muestran niveles muy elevados de Cortisol, una hormona, y de varios agentes que actúan en el cerebro tales como los neurotransmisores, serotonina, dopamina, y noradrenalina. En algunos casos estos niveles pueden alterarse incluso por factores genéticos.
¿Cómo prevenirla?
El tratamiento psiquiátrico, psicoterapéutico y farmacológico no es prescindible, es completamente necesario, sin embargo hay diversas herramientas que pueden ser útiles para el día a día.
- Mantener pensamientos positivos.
- Cuidar la salud física.
- Reanudar las actividades de forma lenta y gradual.
- Seguir en todo momento y completar el tratamiento.
- Hacer ejercicio.
- Mantener una dieta equilibrada.